La alopecia es la pérdida anormal del cabello, por lo que muchas veces se usa como sinónimo de calvicie. Sin embargo la alopecia no solo puede estar presente en el cuero cabelludo, sino en otras áreas donde existe pelo, como pestañas, axilas, área genital y barba.

Se pueden clasificar en dos grupos: alopecias cicatriciales, con destrucción del folículo piloso y por lo tanto irreversibles, y las formas no cicatriciales, que son potencialmente reversibles.

Alopecias No Cicatriciales:
– Alopecia androgénica: Es la más común y se presenta en 2 patrones, el masculino con pérdida de pelo principalmente en zona frontal y parietal, con un intenso retraso progresivo de la línea de implantación anterior al pelo, o entradas. Con afectación más tardía en la región vértex o coronilla.

El patrón femenino, presenta pérdida de pelo difusa, no produce zonas de calvicie total y queda normal la línea de implamtación anterior, o sea no produce entradas.

– La alopecia areata: Es un tipo de caída del cabello que ocasiona parches redondos. Los folículos pilosos no quedan destruidos con esta enfermedad, por lo que el pelo puede volver a crecer, si bien es cierto que son muy frecuentes las recidivas o recaídas en pacientes que la han sufrido alguna vez. 

– Alopecia traumática: Son todas aquellas producidas por traumatismos físicos como tracción, presión o tricotilomanía.

– Alopecia difusa: La alopecia difusa consiste en una pérdida de cabello más o menos intensa, aguda o crónica, pero reversible y no localizada en una determinada porción del cuero cabelludo. La pérdida de cabello tiene lugar entre 2 y 4 meses después del factor desencadenante. Se produce por ejemplo tras el parto, enfermedades graves, procesos febriles, estrés o pérdidas importantes de peso.

Alopecias Cicatriciales: 

Este tipo de alopecias suele ser irreversible porque existe un daño, malformación o ruptura total de la estructura folicular. Se clasifican en infecciosas, por agentes físicoquímicos, tumorales o por dermatosis.

Para diagnosticar el tipo de alopecia debe realizarse una historia clínica, analítica orientada a detectar alteraciones que justifiquen una caída aumentada de cabello con su estudio histopatológico, a veces también es necesario una biopsia del cuero cabelludo. Después de realizado un estudio y diagnóstico exhaustivo podemos determinar con exactitud el motivo de la caída y elegir el tratamiento más efectivo.

En los próximos blogposts vamos a hablar de los tratamientos para la alopecia y sus resultados, no te lo pierdas.

La exposición solar tiene mala reputación, aunque no es por completo negativa. La exposición solar provoca en el cuero cabelludo vasodilatación, lo que incrementa su actividad metabólica y favorece el crecimiento más rápido del pelo y favorece también la síntesis de vitamina D.

Su reputación no es para menos y es que la exposición excesiva al sol puede provocar daños en el pelo, como quemarlo, cambiar su textura, hacerlo más frágil, deshidratarlo y lograr que pierda color. Por eso, es importante mantener una serie de cuidados durante el verano en esta ola de calor.

La exposición a la radiación ultravioleta favorece el estrés oxidativo y, por lo tanto, el envejecimiento prematuro del pelo. Este daño se verá acentuado si nos exponemos además a sustancias como el cloro, sal y arena que hacen el pelo más frágil y quebradizo. Por lo cual te recomiendo tratamientos de hidratación y nutrición, además del uso de protector solar capilar.

Te dejos algunos Tips para esta temporada de calor:

1. Cubre la cabeza con una barrera física como una gorra, sombrero o parasol.

2. Hidrata el cabello con el uso de mascarillas que nutran el cabello o reparen la queratina.

3. Usa shampoo con ingredientes suaves y naturales, sin sulfatos que debiliten la capa de agua.

4. Usa protector solar capilar.

5. Se recomienda no hacerse peinados demasiado tirantes cuando está mojado, ni tenerlo demasiado tiempo húmedo.

6. Moja el pelo antes y después de meterse en la piscina o el mar, ya que disminuye la capacidad de absorción de sustancias, como el cloro y la sal.

Las cejas enmarcan la mirada y le dan al rostro un aspecto armónico. De hecho, perder las cejas altera por completo la apariencia y la expresión de la cara y afecta mucho más al marco facial que la caída del pelo. Tanto es así, que la alopecia de cejas es uno de los motivos que más preocupa a los pacientes que acuden a consulta.

Entonces, te recomiendo estar atenta a los pequeños cambios, notar a tiempo algún hueco en una zona que antes no veías puede ser el inicio de una enfermedad, y si vienes a tiempo a consulta, pues podemos diagnosticar e iniciar el tratamiento adecuado y devolver su belleza a estas, sin mayor contratiempos.

Las causas de la alopecia son variadas y depende de cada organismo. Entre ellas las más comunes son los desarreglos en la tiroides, principalmente el hipotirodismo. Reacciones del sistema inmune, una de las principales causas de la alopecia areata. Y tratamientos agresivos como la quimioterapia o la radioterapia.

Muchos pacientes me preguntan cuál es la mejor forma de lavar el cabello y el estado en el que debe estar el agua. Sin embargo, tanto el agua fría o caliente tienen sus pro y sus contras a la hora de enjuagar el cuero cabelludo.

Agua Caliente:

Ventaja: Enjuaga la suciedad que se acumula en el pelo, debido a que el vapor abre los poros y elimina mejor la grasa que hay en el cuero cabelludo.

Desventaja: Aumenta la porosidad del cabello, dejándola quebradiza ya que barre con los aceites y humedad natural del cabello.

Agua Fría:

Ventaja: Sella la humedad del cabello y aumenta el brillo, ya que el agua fría logra alisar el cabello cerrando las escamas de la cutícula, añadiendo al mismo tiempo mucho brillo.

El agua fría mejora la circulación de la sangre en la cabeza. Es por esto por lo que cuando te duchas con agua fría, los capilares se contraen y la sangre tiende a circular más rápido para mantener la temperatura corporal. Esto ayuda a reducir la pérdida de cabello.

Desventaja: Quita volumen y movimiento, por lo que si tienes el cabello fino es mejor lavar el pelo con agua tibia. Ahora, si tienes el pelo rizado es mejor lavar el pelo con agua fría.

Lo ideal es no irse a ninguno de los extremos. Con ambos métodos sobre la mesa, la mejor forma de lavar tu cabello sigue consistiendo en usar ambos métodos: empezar con agua caliente y finalizar con agua fría. De esta forma, puedes obtener los beneficios de ambos métodos. Al usar agua caliente primero, vas a disolver y limpiar los productos para el cabello, mientras abres tus poros y cutículas capilares, lo cual ayudará cuando empieces a masajear tu cabello con champú y acondicionador. Luego, al usar agua fría, cerrarás nuevamente tus cutículas y poros mientras sella la humedad que mantendrá tu cabello sano, brillante y libre de frizz.

El ácido salicílico es un compuesto que desde los tiempos de nuestras abuelas era usado en el cuidado de la piel y continúa hasta hoy en día.

¿Cuáles son sus propiedades y beneficios? Aquí te dejo los más relevantes.

💧 Renueva y suaviza la piel: gracias a su acción exfoliante regula el sebo y ayuda a obtener un tacto más suave y mejora los granos, las verrugas o las cicatrices.

💧 Limpia la piel en profundidad: penetra para eliminar la suciedad acumulada debajo de la superficie de la piel gracias a sus propiedades antibacterianas.

💧 Elimina los puntos negros y espinillas con sus propiedades comedolíticas.

💧 Previene la obstrucción de los poros al eliminar las células muertas del rostro por su efecto queratolítico.

💧 Ayuda a desinflamar los granos para que cicatricen antes ya que posee propiedades anti-inflamatorias.

💧 Combate las manchas, unifica el tono, aporta luminosidad y blanquea la piel gracias a su acción despigmentante.

💧Reduce visiblemente las arrugas, estimula la producción de colágeno y fibras elásticas de la piel, ayudando a rellenar las arrugas.

☝️♦️ Por supuesto no es un producto para todas las pieles, sino que se pueden combinar para obtener el resultado ideal, siempre de la mano de un experto.

Los antioxidantes ayudan a proteger las células del ataque de los radicales libres, que pueden causar inflamación de la piel, daño en la dermis y, en algunos casos, provocar la aparición prematura de arrugas, manchas y otros signos de la edad. Aparte de seguir una rutina cosmética que incluya productos que los contengan, es importante tenerlos presentes también en nuestra dieta a través de alimentos como estos.

Aquí te dejo algunos de los principales, para que no olvides incluirlos diariamente.

Retinol
La vitamina A o Retinol es un súperoxidante. Reduce manchas de la piel y corrige marcas de acné, proporcionando un aspecto joven y radiante. Está presente en lácteos enteros y algunos aliementos fortificados.

Genisteina
Es un derivado de la soja. Esta inhibe el daño por radiación UV, así como sus consecuencias sobre la dermis: Manchas, inflamación y arrugas.

Vitamina E
Promueve la producción de colágeno, ayudando así a disminuir y difuminar las líneas de expresión y manchas causadas por la edad. Está presente en semillas, nueces o bayas de goji.

Vitamina C
Es buena en el tratamiento de arrugas, la falta de luminosidad o eliminación de manchas en la piel. Puede incrementar también la producción natural de colágeno, reducir decoloraciones y reforzar la barrera protectora de la dermis.

Resveratrol
Protege contra los rayos UVB. Promueve la producción de colágeno, y previene el envejecimiento prematuro de la piel. Se encuentra en alimentos como las uvas, las nueces, los arándanos o el vino tinto.

Niacinamida
Posee propiedades anti-inflamatorias y anti-manchas, ayuda a mejorar la textura de la piel y su tono, combatiendo a la vez las líneas de expresión.

La Niacinamida es una forma de la vitamina B, presente en carne blanca, pescados, hígado, cereales integrales y otros.

Intégralos a tu dieta y cuéntame cómo te va.